lunes, 28 de diciembre de 2015

EL REFLEJO



El reflejo en el agua, distorsionado por el vaivén de la brisa, dónde  se mueve poco a poco la barca de mi ser, envuelta en la tranquilidad, hay una atmosfera que envuelve mi alma, y le da estabilidad, las aguas ahora rodean la tormenta, por fin se mira a la lejos la quietud


El sonido que el agua  emite, el sonido que no se escucha, que se siente, que se palpa, que no se puede reconocer


Mientras, me dejo llevar por las mansas aguas, mirando el cielo y las nubes que no dejan de andar, quitando de mi rostro un mechón de cabello, dejando que me inunde esta tranquilidad


Levantando mis brazos hacia  el cielo, tratando de sacar la nostalgia de mi interior, como si nunca se hubiera internado en mi alma este espanto, poco a poco no le permito adentrarse en mi mente, ni en el corazón


Millones de hojas que han caído, dejando a los arboles desnudos, así desnuda esta ahora mi alma, dejando atrás lo que le atormentaba, dibujando con la punta de mis dedos, sobre el agua un inmenso corazón, viendo como las ondas cortan la tranquilidad de ese rio que me lleva lejos, que me protege del dolor


Andando por un nuevo sendero, he decidido amanecer sin tu recuerdo, comienza un nuevo camino, por ahí lejos de tu sendero


Iniciando ahora, la lucha con el olvido, el incesante vaivén de los recuerdos, así como la corriente me lleva lejos, cada vez más lejos de la tormenta, así también mi corazón se tranquiliza con la rutina del día, encontrando más conocida la soledad que se quedó resentida, olvidada


Hice las paces con mi amiga, Soledad, siempre está dispuesta a consolarme, en su mirada me doy cuenta, no ha querido pronunciar las palabras que tiene en los labios, que no ha querido echarme en cara “te lo dije” susurra al viento


Efímeras llamaradas ahora se extinguieron, dejando solamente cenizas que el viento se ha llevado, constantes son ahora las reflexiones, insondables y tan lejanas las lágrimas del corazón


Cierro los ojos y me abandono, sigo la corriente como debí seguir haciéndolo, mis sentidos ahora se han cerrado, shhhh, no hagas ruido, déjalos que continúen durmiendo…
dejalos continuar hibernando...

Autor: Atenea Gzl

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