domingo, 26 de julio de 2015

Despertar

15. jul, 2015

Los ojos abriéndose lentamente, cuando el amanecer comienza a despuntar, despertando del largo letargo que tiene desde la noche, casi no pudo dormir en su mente iban y venían las interminables imágenes de los días anteriores

Al mirarse en el espejo puede apreciar  las bolsas bajos sus ojos los círculos de color ocre que los rodean y de la hinchazón que aún no cede después de tanto llorar

Es algo normal, después de tantas noches de insomnio del mar de lágrimas en el que se convierten todos sus pensamientos

Decide entonces tomar una ducha, para refrescarse, deja correr el agua por su cuerpo, quiere lavarse la piel y lo hace con una fuerza fuera de lo común, como si también quisiera lavarse el alma, quitar las huellas de sus manos de sus besos, de su cuerpo que cada noche recuerda y siente de nuevo como comienza el caudal de lágrimas, se toma de los pies y se deja caer en las baldosas en el suelo

Así tirada deja pasar el tiempo, su casa vacía le grita a la cara su soledad, y ella se pierde 
en sus recuerdos…

-- ¿Qué hacer aquí? Creí que no volvería a verte nunca más

-- quisiera estar contigo, te extraño tanto, no ha sido fácil estar lejos puedo jurártelo

-- y ¿quieres que te crea? Que olvide todos estos meses sin ti

--en verdad te escribí, te llame pero no contestabas estaba inquieto sin saber de ti

-- sabes creo que esto es una gran mentira, no se puede describir la vacuidad que hay en mi interior, por todo este tiempo, te amo pero lo nuestro ya termino perdóname

--por Dios no digas eso, yo te amo déjame regresar contigo

-- no, ya no puedo el dolor es demasiado, prefiero estar sin ti…

De nuevo el dolor llega en oleadas y recorre su cuerpo, siente en sus entrañas moverse una nueva vida, mientras el agua sigue saliendo por el grifo, noche tras noche durante las últimas semanas, las más largas que había vivido, recordando los años los meses los días que estuvo a su lado, ahora todo eso está en el pasado

Su vida comenzó el día que se vio en sus ojos, el día que por primera vez sintió sus labios, el día en el que sintió su cuerpo, cálido a su lado, esa era la sensación que tenía y se aferraba a ella, nunca supo cuánto tiempo paso mientras el agua seguía corriendo, ya no sentía ningún dolor, solo había paz y una tranquilidad que inundaba su alma

En un momento la puerta se abrió, era Susan la chica que siempre pasaba a saludarle y ver como estaba, solamente que esta vez no habló de trivialidades, ni de cosas trascendentales, ese día no se dijeron nada

Cuando Susan entro al departamento, le extraño que no le gritaran desde la cocina como todos los días

--¡hola cariño, entra el café está listo!

Había utilizado su llave como siempre y penetro en la estancia, no escucho ningún sonido hasta que se dirigió al pasillo, y entonces escucho el ruido de la ducha, el agua corriendo, en ese momento sintió una opresión en el pecho y corrió hacia el baño, abrió la puerta de golpe corrió la cortina y entonces la vio

Sobre el blanco azulejo estaba Desiree con los ojos cerrados en posición fetal, y con dos heridas en cada mano, el purpura de su sangre manchaba las baldosas que al combinarse con el agua se veía rosado,

Su expresión había cambiado, era de paz y felicidad, estaba muerta, pero no se había ido sola, se llevó un ángel consigo…

Autor:
         Atenea Gzl


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